Ilusiones
A raíz de la última entrada de Milenius me quedé pensando....(¡Grande Milenius....hace rato que eso no pasaba...)
Ella hablaba de la exigencia de chicos y grandes que todo lo quieren "para ayer"....
Y conociendo muchos de estos chicos demandantes, y sus padres que no saben poner límites a tiempo, me quedé pensando en mi caso en particular.
Mi hija siempre fue una nena feliz, que tuvo todo lo que necesitó y más...No porque lo pidiera, sino porque simplemente papás y el resto de seres queridos se ocuparon de mimarla lo suficiente.Fue largamente esperada y es amada entrañablemente por todos.
No sabemos de llantos ni berrinches por querer algo que no se le concediera. Y no me refiero a que se le concedía todo, sino simplemente a que nunca fue de pedir nada.
Siempre valoró nuestro esfuerzo, nuestras horas de trabajo y poco descanso. Siempre confió en nuestro criterio a la hora de decir NO. Frente a lo material y a las decisiones en general.
"Ustedes son los que saben qué es lo mejor para mí".
PUMMMM!!!! Y ahí es cuando el asombro se vuelve gratificación. Aunque no deja de dar algo de temor tanta confianza depositada en nosotros.
Ahora bien...En poco menos de un mes, "la nena" cumple 13, y con ellos se aproximan los cumpleaños de sus amigas que ya van llegando a los 14 y, como es lógico de esperar, comienzan los preparativos para las fiestas de 15.
Esa fiesta de 15, con la que mi "bebé" sueña desde que tiene uso de razón, era increíble ver cómo una nena de apenas 4 años ya planificaba esa "noche de cuentos de hadas".
Ella hablaba de la exigencia de chicos y grandes que todo lo quieren "para ayer"....
Y conociendo muchos de estos chicos demandantes, y sus padres que no saben poner límites a tiempo, me quedé pensando en mi caso en particular.
Mi hija siempre fue una nena feliz, que tuvo todo lo que necesitó y más...No porque lo pidiera, sino porque simplemente papás y el resto de seres queridos se ocuparon de mimarla lo suficiente.Fue largamente esperada y es amada entrañablemente por todos.
No sabemos de llantos ni berrinches por querer algo que no se le concediera. Y no me refiero a que se le concedía todo, sino simplemente a que nunca fue de pedir nada.
Siempre valoró nuestro esfuerzo, nuestras horas de trabajo y poco descanso. Siempre confió en nuestro criterio a la hora de decir NO. Frente a lo material y a las decisiones en general.
"Ustedes son los que saben qué es lo mejor para mí".
PUMMMM!!!! Y ahí es cuando el asombro se vuelve gratificación. Aunque no deja de dar algo de temor tanta confianza depositada en nosotros.
Ahora bien...En poco menos de un mes, "la nena" cumple 13, y con ellos se aproximan los cumpleaños de sus amigas que ya van llegando a los 14 y, como es lógico de esperar, comienzan los preparativos para las fiestas de 15.
Hoy, que ese tiempo ya va acercándose, la billetera empieza a temblar, al compás del corazón que se acelera al verla tan "señorita", pidiendo, quizás por primera vez en su vida, algo que la haría inmensamente feliz.
Y ahí se desbaratan todos los cuestionamientos...."Tanto dinero para una sola noche". "¿Y si mejor nos vamos de viaje?", "Te compro un auto para cuando aprendas a manejar" - Son los argumentos "razonables" de un papá que no concibe semejante derroche en una fiesta.(Por sencilla y modesta que se plantee sigue siendo un derroche).
Y frente a estos argumentos una vez más el asombro.
"Cuando yo trabaje voy a poder ahorrar para viajar y comprarme el auto"- "contraargumenta" la futura quinceañera, con la convicción absoluta de que ya sus experiencias de ahorro le demostraron que puede conseguir lo que se propone. (Algo que heredó del padre, porque la madre jamás logró tener una alcancía).
Y es ahí cuando mamá y papá, frente a frente, sucumbimos a sus sueños y nos preguntamos si podemos ponerle precio a semejante ilusión....
Y allá salimos los tres, rumbo a ese salón que nos recomendaron, que se convirtió en el primer escalón de este camino a "su noche" largamente soñada...
Y descubrimos con placer, que al menos por un momento, el dinero pasó a un segundo plano...
Los brillitos en sus ojos al ver cada detalle de una fiesta que aún no iba a ser suya, como por arte de magia, se extendieron a los ojos de su papá...
Y me arrugaron el alma de emoción, al verlos ensayar "de mentirita" ese vals que será la concreción de un sueño largamente acariciado, de esta princesa que nunca pidió nada, salvo su fiesta de quince...
Comentarios
en España no se celebra esa fiesta, pero al leerte me gustaría que SÍ se hiciera, porque no hay nada más bonito y valioso que la ilusión de un niño. Es cierto que, económicamente, será un derroche... pero más cierto es que nada en el mundo podrá pagar la felicidad inmensa que ese día vuestra hija -y vosotos- vais a sentir.
Créeme que, sólo de leerte y pensar en ello, me he emocionado muchísimo.
Besos grandes.
Nunca te olvides del dicho "Haz lo que quieras. Igual hablarán mal de ti".
¡Éxitos!
PD: mirame a mi, de musa inspiradora...
Uno toma la decisión que le parece correcta y a nadie de fuera le debería importar.
Porque como dice el refrán...
¿Cómo era?
Me olvidé.
No importa, pero hay un refrán.
Besos
Que los más allegados ayuden pagando una tarjeta. Nosotros hacemos así. Vamos todos y lo pasamos divino. Si no siempre queda alguien afuera porque la plata no alcanza.
Qué lindo proyecto!!
Milenius...¿Qué tul? Vio? Lo que pudieron sus palabras... Lo que piense el resto no tiene importancia...sólo son planteos internos....
Gamar: "Los de afuera son de palo"?
¿Era ese?
Como le decía a Milenius, nadie tiene derecho a opinar y eso no está en cuestión...sólo mamá y papá evaluando entre el corazón y la billetera...
Usted me conoce...Adivine quién gana...
Soledad: La fiesta se viene a full... Pero eso de que la gente se pague lo suyo,mmmmm...va en contra de nuestros principios....Ya veremos!
te mando un beso! y a la niña tambien !
Felicidades por la pequeña y disfruten mucho cada momento.
Un bso, con mucho cariño.
Por suerte tengo un hijo varón.
Yo entiendo lo que significa para una criatura "SU" fiesta, pero estamos viviendo un tiempo que realmente hace imposibles muchos sueños de chicos y no tan chicos.
Siempre digo que si tuviera una hija mujer y tuviera las posibilidades económicas, haría fiesta. Pero no concibo las deudas para eso.
El mío está por cumplir los 14 así que todo este tema lo tengo visto desde hace un tiempo.
¡Que te sea leve!
Besos gigantes, Gla!
Lao: Ya estamos en camino de "hacer historia" entonces...el brillo en sus ojos ya paga de antemano el sacrificio...
Fabi: Ya leí tu post y contesté con palabras de mi hija que, dicho sea de paso, no quedó muy conforme con tus sugerencias. Tampoco estoy de acuerdo con endeudarse, por eso estamos planeando dos años antes, para que en vez de deudas haya ahorros.
Vero: Absolutamente de acuerdo con vos....Va a ser un instante tan fugaz que nos propusimos empezar a disfrutarlo desde ahora en lugar de padecer los preparativos.
Joaquín: Pronto, demasiado pronto para mi gusto se va convirtiendo en una mujercita.....como para que el corazón no tiemble...